martes, 27 de enero de 2015

Respetables

Pintura de Egon Schiele

Habitantes perfectos de su gris edificio,
Predadores variados: anfibios o peces
O saurios a lo más, raza de pies
De cuchilla. ¿Cómo sois tan seguros
En la construcción de muros,
En el llenado de grandes botellas
De humo, cómo podéis tanto
Pesar en el hueco del odio,
Llenarlo con vuestro bulto
Y coserlo con vuestras voces
Chirriantes? ¿Dónde hallasteis
El aire gris donde tan a gusto
Vivís, con el veneno
Intermitente de vuestros
Escupitajos intencionados
Que cruzan el aire peligrosos
Y repugnantes? Raza extraña,
Escamada, de vacías
Miradas masculinas
Y tatuajes de vello femenino
Entre las voces amputadas
De belleza, dejadme
Apearme de ese barco
Fantasma, hacer pie
Por fin en puerto soleado.

sábado, 17 de enero de 2015

Si la vida...

Imagen: "La pasión de crear", de Leonid Pasternak

Si la vida no nos intentara sujetar con sus manos
No sería necesario escribir.
Si detrás del cartón no encontráramos
Un naipe que todo lo torciera
No necesitaríamos escribir.
Si la vida fuera un aire continuo,
Un fluído siempre expansivo,
No, no sería preciso.
No habría que hacer fricción con nuestra inercia,
Ni esconder negras trampas en huecos en el papel.
Si la vida no tuviera sabores
Y solo fuera las palabras que preveíamos,
Lo único necesario sería algo parecido a vivir.

martes, 6 de enero de 2015

El quimérico frío


Ventanas nevadas en Londres. Foto de Sheila Thomson

El quimérico frío
Silencioso, primero aprehensible por la mente;
Alimento para la mente.
Hoy, de repente, está detrás de esa ventana
Y la mente sabe, con placer masoquista,
Austero,
Que nos vamos a hundir en él
Que  nos  va a  maridar  no  sabemos desde qué  momento
Con no sentida cópula
(Como la novia no sabemos
Con el que su lado ya frecuenta)
Pero inexorable, como un destino
(Eso que no podemos ahora, que nos flota
Por encima, un destino).
Como una sucesión  de palabras formarán fatalmente un golpe
Completo.
El quimérico frío ha fecundado los objetos
De fuera: ¡Escucha su silencio!
Escucha a los objetos, que ya no irradian
Sino piensan.


viernes, 2 de enero de 2015

En la sopa de silencio

"Dentro de la escultura "el Alma del Ebro" en Zaragoza, España" de Juanedc

En la sopa de silencio
Viven, atentas, las palabras.
La línea recta de aire
Hasta el horizonte infinito
No es verdad: están
Todas las conciencias
Agazapadas cerca,
Al calor.

Pero no se mueven.